Moscú está interesada en mantener la influencia en el antiguo estado soviético, un país estratégicamente posicionado junto a Ucrania y el Mar Negro.
Moldavia ha votado por poco a favor de vínculos más estrechos con la Unión Europea en un referéndum dominado por afirmaciones de interferencia rusa.
La campaña del sí tuvo el 50,39% de los votos con solo un puñado de papeletas por contar, dijo la comisión electoral del país.
Parecía estar atrasado hasta que se contaron los últimos miles de votos de los moldavas que vivían en el extranjero.
Se preguntó a los votantes si consagrar el objetivo de la membresía de la UE en la constitución del país.
El presidente pro-UE de Moldavia ha acusado a los grupos «que trabajan junto con fuerzas extranjeras» de tratar de comprar 300.000 votos.

Un portavoz de la Unión Europea afirmó el lunes que había habido «intimidación e interferencia extranjera sin precedentes por parte de Rusia y sus apoderados».
La policía moldava también dijo que también se habían incautado dinero y documentos supuestamente vinculados a grupos respaldados por Rusia.
El Kremlin, que niega las afirmaciones, criticó la votación y dijo que la «oposición se vio privada de la oportunidad de participar en el proceso electoral».
Dijo que la «elección no era gratuita» y que el «aumento repentino de votos» para el lado pro-UE era «difícil de explicar».